Las Escrituras inspiradas por el Espíritu están fundadas en el testimonio de Jesús de Nazaret. Él y solo Él dota de unidad, continuidad y coherencia tanto al Antiguo como al Nuevo Testamento, y nadie puede tener una visión integral y precisa de la Biblia sin Jesús como el centro de todas las fases de la exégesis. Él es el tema de la Biblia (Juan 5:39-40). En este módulo, examinaremos algunos indicadores significativos del testimonio que ofrece el Antiguo Testamento en cuanto al Mesías, y veremos que tales indicadores ofrecen bases fuertes en la comprensión del significado de toda la Escritura. En las lecciones de este volumen, examinamos la relación del Antiguo Testamento con el Nuevo Testamento a través de la revelación progresiva, así como los eventos, instituciones y personas del Antiguo Testamento que representan una analogía y nos ayudan a comprender la relación de Dios con todos los redimidos a través de Jesucristo. Estudiaremos específicamente los personajes clave del Antiguo Testamento en función de los roles de Jesús como profeta (Moisés), sacerdote (Melquisedec) y rey (David). Finalmente, consideramos la naturaleza y alcance de la profecía mesiánica del Antiguo Testamento, que nos provee un testimonio claro de Jesús de Nazaret, como el cumplimiento del Cristo prometido y su reino venidero.