Conforme al claro testimonio de las Escrituras acerca de sí mismas, Dios capacita a sus representantes mediante la Palabra de Dios, inspirada por el Espíritu, es decir, las Escrituras. Cada persona que Dios llama al ministerio deberá tener la determinación de disciplinarse, a fin de dominar el contenido de la Palabra, someterse a sus mandatos y enseñar sus verdades. Como obrero u obrera, es su deber esforzarse por usar acertadamente la verdad y de ese modo, ser aprobado/a por Dios en el estudio de la misma (2 Ti. 2.15). En este curso, esbozamos la necesidad de la interpretación bíblica y lo que implica llevar a cabo esta tarea tan importante. Exploraremos tanto la dimensión divina como la humana de la Biblia y presentaremos un método efectivo de interpretación bíblica, diseñado para ayudarle a estudiar las Escrituras de modo que pueda cruzar la brecha entre el mundo antiguo y el contemporáneo. Además resaltamos la importancia de las formas literarias en la interpretación bíblica, y exploramos la gran cantidad de herramientas sólidas de referencia que tenemos a disposición cuando intentamos comprender el significado de un texto bíblico en particular.
